Hoy hablamos con Salomón Zarruk, CEO de Mono, quien nos comparte su transición del mundo del derecho al emprendimiento fintech. Después de comenzar su carrera en una firma de abogados, Salomón decidió emprender su propio negocio en el sector de alimentos, que luego vendió. Tras su paso por el mundo fintech en Colombia, y una maestría en Londres, fundó Mono en 2020, en plena pandemia, con el objetivo de ofrecer soluciones de infraestructura fintech para empresas que buscan simplificar su operación.
¿Cuéntanos cómo nació Mono?
Mono comenzó ofreciendo cuentas bancarias para empresas. Sin embargo, el año pasado hicimos un pivote orgánico porque nuestros propios clientes nos solicitaron un producto diferente. Así, nos enfocamos en lo que hoy es nuestra oferta principal: infraestructura Fintech para empresas.
¿En qué consiste el nuevo producto?
Nuestro producto actual es Fintech embebido para empresas. Proveemos infraestructura que permite a las empresas lanzar tarjetas, funcionalidades de transferencia o wallets digitales sin necesidad de desarrollarlas internamente. En cuestión de días, pueden implementar soluciones complejas con nuestra tecnología, simplificando el proceso.
¿Cuál es el perfil de los clientes ideales para Mono, y qué necesidades específicas buscan cubrir con sus servicios?
Nuestros clientes ideales son empresas que necesitan desarrollar productos Fintech, pero que no tienen la tecnología como parte de su core de negocio. Por ejemplo, empresas de sectores como logística, e-commerce, dropshipping, o cooperativas que quieren ofrecer wallets digitales, tarjetas o transferencias, pero sin la capacidad de desarrollarlas internamente. Nosotros les proporcionamos las APIs y toda la infraestructura necesaria para que puedan lanzar estos productos en cuestión de semanas, facilitando así su operación.
¿En qué momento decidieron enfocarse en ofrecer infraestructura financiera en lugar de operar como un neobanco? ¿Qué los llevó a tomar esa decisión?
Comenzamos ofreciendo una cuenta bancaria para pymes, pero tres factores externos nos llevaron a pivotear. Primero, la DIAN no permitía que bancos no triple A procesaran pagos de impuestos, lo que obligaba a nuestros clientes a cambiar de banco. Segundo, no podíamos ofrecer transferencias internacionales porque nuestro banco aliado no tenía SWIFT. Finalmente, el network effect de los principales bancos con transferencias gratuitas en tiempo real nos afectaba. Además, nuestros clientes comenzaron a pedir infraestructura Fintech, lo que impulsó nuestro crecimiento, y decidimos enfocarnos en ello.
Háblame un poco sobre las funcionalidades que tienen ahora. ¿Qué es lo que va a encontrar un cliente cuando abre una cuenta con ustedes o cuando implementa la infraestructura de Mono?
Ofrecemos infraestructura en cuatro áreas principales:
- Tarjetas Visa: Permitimos a nuestros clientes emitir tarjetas virtuales y físicas, además de próximamente integrarse con Google Pay y Apple Pay. Nos encargamos de toda la lógica de autorización de transacciones y cumplimos con los requisitos financieros, facilitando a las empresas el lanzamiento de productos de tarjetas sin complicaciones técnicas.
- Transferencias: Proveemos transferencias ACH y en tiempo real. Nuestro equipo maneja toda la lógica detrás de este proceso, lo que permite a los clientes habilitar estas transferencias sin necesidad de desarrollarlas desde cero.
- Saldos virtuales: Hemos desarrollado un ledger que gestiona la contabilidad de saldos para empresas. Este producto es ideal para quienes quieren ofrecer wallets digitales a miles o millones de usuarios, ya que soporta las funcionalidades de transferencias y tarjetas.
- Wallet marca blanca: Proporcionamos un wallet digital completamente desarrollado, listo para que las empresas lo lancen sin necesidad de escribir una línea de código. Este wallet soporta saldos, transferencias, tarjetas y, en el futuro, integrará redes de cash in y cash out.
Este enfoque les permite a nuestros clientes lanzar productos fintech complejos de manera rápida y eficiente.
¿Esto es solo en Colombia o tienen presencia en otros países de Latinoamérica?
Actualmente operamos en Colombia con nuestra infraestructura de tarjetas. Estamos próximos a expandirnos a México y Perú, y planeamos comenzar a llevar nuestra solución a otros países el próximo año. Nuestra visión es hacer que esta infraestructura esté disponible en toda la región, ayudando a más empresas a lanzar productos fintech rápidamente, no solo en Colombia sino también en otros mercados clave de Latinoamérica
Desde que llega un cliente con ustedes, ¿cuánto tiempo toma el desarrollo?
El tiempo de desarrollo depende mucho del cliente. Nuestras APIs están diseñadas para ser muy sencillas de integrar, especialmente para empresas con un core tecnológico. Hemos tenido clientes que han lanzado en tan solo dos semanas, mientras que otros han tomado más tiempo debido a procesos internos. Desde nuestro lado, todo está preparado para facilitar la integración rápidamente, y podemos proporcionar las llaves de producción en un período muy corto, generalmente en cuestión de semanas.
Desde tu perspectiva como abogado, ¿cómo ves la regulación en Colombia?
Colombia es uno de los países más avanzados en la región en términos de regulación fintech. Hemos visto avances significativos, como el desarrollo del sandbox regulatorio, en el cual mi socio Sebastián y yo fuimos los primeros en participar cuando trabajábamos en otra fintech. También hay iniciativas clave como el open finance y el sistema de pagos inmediatos del Banco de la República. Además, el modelo de corresponsalía digital ha sido esencial para habilitar el banking as a service, que permite a Mono operar respaldado por un banco. Soy muy optimista sobre el futuro regulatorio en Colombia
¿Cuáles son los mayores retos que enfrenta Mono actualmente y cómo están trabajando para superarlos?
Nuestro mayor reto es que ofrecemos un producto robusto y complejo, ya que manejamos transacciones de dinero de los clientes. Aunque no tenemos los fondos directamente, trabajamos con transacciones de débito y crédito, por lo que incluso un pequeño error, como la imprecisión de un centavo, podría generar un caos en la contabilidad de los clientes. Esto nos obliga a refinar y sofisticar el producto al máximo. Aunque el mercado demanda rapidez, debemos movernos cuidadosamente, como cuando desarrollamos el ledger, que tomó casi un año en perfeccionarse.
¿Qué podemos esperar de Mono en los próximos 6 meses a 1 año, en términos de crecimiento y nuevos desarrollos?
En los próximos 6 meses a un año, nos enfocaremos en crecer, desarrollar nuevos productos, integrar más clientes y expandir nuestras operaciones. A finales del año pasado, cerramos con menos de un millón de dólares en facturación anualizada, y este año nuestro objetivo es alcanzar los cuatro millones. Ya pasamos el punto de equilibrio y, aunque nuestras utilidades aún son modestas, estamos felices de haber logrado que la empresa sea autosostenible. El siguiente paso es seguir creciendo y generar mayores retornos.
This post is also available in: English (Inglés)